20091231

Felices Lo Que Sea! Parte 2 (o De Libros No Leídos)

No me considero una persona festiva. Pero hay dos fechas en el año en las que sí me siento particularmente emocionado (mm.. no sé si ésa sea la palabra que busco, tal vez sí la más cercana.) Una de ellas es mi cumpleaños, obviamente. La otra es el último día del año. La víspera de Año Nuevo, pues. A diferencia de la Navidad, de la cual ya expresé mi opinión ayer, en Año Nuevo siento mucho más válidas esas buenas intenciones que todos exteriorizamos hacia los demás. Simplemente porque empieza un nuevo conteo a partir de un sistema impuesto por los romanos, si quieren verlo así, pero la idea es, definitivamente, la de renovación. El cambio que todos esperamos, no importando como nos haya ido en general en el transcurso del año que termina.

Y es que el cambio es algo necesario para todos, por mínimo que sea. Pienso que la víspera de año nuevo es el pretexto perfecto para provocarlo. En mi caso, me gusta pensar que mi cumpleaños es como la "segunda oportunidad" en el año, puesto que cae casi a la mitad. En fin, desde mi punto de vista, tienes problemas si no usas aunque sea una de estas dos fechas como pretexto para ese cambio (si necesitas una razón, si no, bien puede ser cualquier día, claro). Y no hablo sólo de los propósitos típicos de estas fechas: "voy a hacer ejercicio, voy a bajar de peso, voy a dejar de fumar, le diré a la niña que me gusta que me gusta, etc. etc.". Hablo de una nueva forma de ver la vida, como una nueva filosofía... o no tan nueva, no sé. No importa, aquí lo principal es tratar de iniciar una vibra positiva para tener un moméntum positivo todo el año, o por lo menos el mayor tiempo posible. Probablemente ya lo tienes, y qué bueno por ti, deja de leer esto entonces. Jajaja no, no es cierto. Si ya lo tienes, sigue así, dale el valor y la importancia justos, y preocúpate por mantenerlo.

Desde hace tiempo trato de no dejar un libro a medias cuando se presenta el cambio de año. Con "a medias" no me refiero a no terminarlo nunca, sino a no terminarlo antes de que acabe el ciclo. Siempre trato de terminarlo antes. Tengo ahora un libro en mis manos. Bueno, no en este momento, sólo tengo dos manos para escribir, pero me entendiste. Tengo un libro nuevo en mis manos, lo compré hace dos días y no lo he abierto siquiera. No es un libro especial, es uno más que leeré porque me llamó la atención. No sé aún si tenga algún mensaje que me haga apreciarlo más que otros ya leídos, o que me disguste tanto como para no tocarlo de nuevo. Lo que sí tengo claro es que esperaré hasta mañana, el primer día del nuevo año, para comenzar a leerlo. Ahora, quizá te preguntas qué tiene de especial o simbólico esto de empezar una lectura el primer día del año. Pues nada, la verdad. Simplemente es uno de esos pequeños detalles a los que me gusta darle un valor. Quiero pensar que es parte de una nueva visión de este universo. Quiero pensar que algún día empezaré a escribir mi propio libro, y que alguien en el futuro esperará a leerlo y le dará un mensaje, relevante o no, para su vida.

Sí. Creo que ya no sólo leeré, sino escribiré también en estas páginas en blanco que me quedan, porque no sé cuándo se terminarán. Toda mi vida mi mayor obstáculo -y probablemente el único- he sido yo mismo. Mi mayor problema es que pienso demasiado las cosas (y cuando digo demasiado es
demasiado, créeme). Creo que ya es tiempo de actuar lo que pienso. De decir lo que escribo. Sin pensar tanto en las consecuencias. Así que sí, creo que hoy sí estoy particularmente más emocionado que otros días. Y si ayer dije que cualquier día deberíamos desearnos cosas buenas, hoy es un día que no podemos dejar de hacerlo.

Feliz Año Nuevo.



20091230

Felices Lo Que Sea! Parte 1 (o Al mal tiempo, buena cara de pen..sar)

Creo que no entiendo la Navidad. No me malentiendan, por favor. No soy un grinch más de los que surgen en estas fechas. Bueno... a veces sí. Me puede poner muy de malas cómo se pone la gente toda loca con las compras, las vacaciones, etc. Sobre todo las compras. Lo que me lleva al punto de partida. Lo que no entiendo de la Navidad es lo siguiente: ¿por qué necesitamos una fecha en específico para...? ... Momento. Debo aclarar algo primero. Esto no es una contra-propaganda más del tipo "¿por qué hay un día de la madre? puede ser todos los días" o "el día del amor es una treta mercadológica, siempre es día del amor"
... Bueno, aclarada esta cuestión, lo que quería decir es ¿por qué debe haber una fecha en específico para "desearle lo mejor a todos y que se la pasen muy bien con sus seres queridos"? ¿Eso no debería ser intrínseco a nuestra humanidad? Sí, yo sé que suena muy idealista, más aún en estos tiempos tan cercanos al apocalipsis (si vieron 2012 saben de qué hablo, si no, de todos modos los zombies acabarán con todo). Como sea, a lo que voy es: ¿por qué no desearle buenas cosas siempre a todos? Por poner un ejemplo: hoy en la mañana la señora de las gorditas (uuuhh.... gorditas... ñam ñam) me puso una jeta como para decirle "échele ganas con el negocio a ver si sigue viniendo gente con esa pinche actitud". Pero, en vez de eso, le dije "muchas gracias" y le sonreí. Hasta me miró raro, pero funcionó y me dulcificó su tono. Iba yo a rematar con un "que tenga un buen día", pero tampoco es kermés.
Evidentemente, es muy difícil hacer esto. Por lo menos para quienes carecemos de excesivas habilidades sociales, y dependiendo, obviamente, de las circunstancias. En fin, inténtenlo de vez en cuando, está bueno el experimento.

Está bien, confieso que tendré que dividir este post en dos partes, porque, como muchos saben (jajaja.. "muchos") tiendo a distraerme fácilmente. Además, muero de sueño, hoy me levanté muy temprano (8 de la mañana estando de vacaciones es temprano, digan lo que digan). Mañana la segunda parte. O tercera porque son como dos temas en uno. O más... Ya no sé. Adiós.



20091223

Crónicas sobre la Memoria Desequilibrante y unos Momentos de Belleza III

A veces, sólo a veces, me sería bastante conveniente dejar de soñar contigo. Así no tendría conflictos mentales que me ataquen día a día. Y podría mirarte a los ojos sin que alteres mi sintaxis, sin que pongas mi juicio en entredicho. Quisiera poder fantasear que caminamos en el aire, sin otra preocupación más que explorar los motivos de tus labios. Sin nada más alrededor que promesas silenciosas y el sonido de versos improvisados que caen de tus manos entre un gota a gota de caricias.

Quisiera pensar que me puedo acostumbrar a estar en tu presencia. Quisiera acostumbrarme, para no quererte así. Para no tener que hacerme el serio si me hablas. Quisiera no pensar. Parece que, al final, no soy más que un hipócrita, por fingir indiferencia a tus secretos, cualesquiera que éstos sean.

Ya no quiero (ni puedo) permitirme estos momentos de agridulce reflexión. Es evidente que mereces mucho más que sólo eso. Puede ser que ya obtuviste lo que buscas, y que entonces mis barcos de papel han naufragado antes de zarpar, repletos de palabras que, a la fecha, no creerías son para ti. Como mucho de lo que hago, sin alguna explicación más lógica que tú.

Now the sky could be blue
I don't mind
Without you it's a waste of time.

-Coldplay

20091221

Viceversa

Dicen que escribimos lo que no nos atrevemos a decir. El otro día, mientras hojeaba un libro, encontré esto, y no pude menos que admitir que da justo en el clavo. Por eso el autor era quien era.

Viceversa

Tengo miedo de verte
necesidad de verte
esperanza de verte
desazones de verte

tengo ganas de hallarte
preocupación de hallarte
certidumbre de hallarte
pobres dudas de hallarte

tengo urgencia de oírte
alegría de oírte
buena suerte de oírte
y temores de oírte

o sea
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo
y también
viceversa.


Mario Benedetti

20091214

Crónicas sobre la Memoria Desequilibrante y unos Momentos de Belleza II

(No estoy aquí. Aunque puede ser que haya algo de mí, en esencia. Puede ser que me tengas justo frente a ti y no te des cuenta).

Intento quedarme dormido para escapar de las ganas de escribir(te). Trato de entrar en un limbo entre sonidos, luces y texturas, en un collage de imágenes casi congeladas, intermedio entre inconsciencia e introspección. Mi cerebro entonces se convierte en un radar involuntario de emociones encriptadas en canciones. De mensajes inventados de la nada por mi corazón imaginante. De palabras que no han sido pronunciadas, ni serán. Y duele. Prefiero así disolverme entre las sombras, para negar cualquier espacio a la efímera ilusión sin fundamentos. Que si de esperanza hablamos, se niega a morir, pero la que queda la tiene la otra versión de mí. Aquella que hace todo por salir y, a través de gestos o frases a primera vista accidentales, me hace intentar decir lo que no puedo dejar de escribir...

...and it burns, burns, burns... the ring of fire.
-Johnny Cash

20091114

Crónicas sobre la Memoria Desequilibrante y unos Momentos de Belleza I

Ayer la luna se vistió de gris, quizá para tratar de camuflarse con el día nublado. Felizmente para mí, no lo logró. Y creo que haga lo que haga, yo nunca podría dejar de darme cuenta de cómo ilumina cada espacio y momento con su sola presencia. De cómo parece que provoca un equilibrio entre el caos de mis circunstancias. Lo mejor, y quizá sea ésta la clave de su efecto sobre mí, es que ella lo hace sin saberlo, de forma total y absolutamente involuntaria. Y entonces no me quedan más opciones que sentirme afortunado por ser capaz de apreciar el mundo bajo la luz que ella despide.

20091112

Seis líneas

Hace poco tuve un sueño muy extraño y muy corto pero, sobre todo, muy triste. En él, perdía a todos mis amigos de golpe. Sin previo aviso y de una forma horrible, que me abstendré de relatar. El punto es que me desperté queriendo decirles a todos lo que muy pocas veces digo (por no decir que nunca). Si estás leyendo esto, amig@, debes saber que te quiero y que de alguna forma has influido en mi persona. En otro post me preguntaba de qué modo habrían repercutido mis acciones y mis palabras en la gente que me rodea. Lo cierto es que nunca me he detenido a hacer lo contrario. Es decir, sí reconozco, por lo menos de forma general, en qué aspectos de mi vida, incluso de mi personalidad, existe un poco de aquellas personas cercanas a mí, y que por algo llamo familia y amigos. Pero nunca me molesto en decirles cuánto significan para mí. Claro que trato de demostrarlo, pero eso no siempre resulta como quisiera. Nada tan claro como esas dos palabritas tan simples que no a todos nos es tan fácil pronunciar. Suena trillado sí, suena a e-mail de cadena con animalitos ridículos o con paisajes y musiquita de fondo, suena cursi. Pero hazte un favor: la próxima vez que sientas que necesitas decirle a alguien que l@ quieres, hazlo. Es más simple de lo que crees, y puedo decirte que es peor cuando el hubiera se hace presente, y entonces los años de ausencia se convierten en pequeñas líneas, en pequeñas marcas que se van grabando en tu alma.

Todo esto me viene a la mente porque el día de hoy, hace seis años, Dios quiso llevarse a un miembro de mi familia. Si quieres saberlo, sí, todavía me entristece recordarlo. No lo demuestro, pero todavía tengo dentro de mí algo de sensibilidad como para no olvidarlo. Me han dicho que tengo mucho de él. Físicamente puedo asegurar que sí; he visto fotos. Seguramente de todo lo demás también, puesto que no sólo la genética se pasa de generación en generación. Tristemente, en 23 años de conocerlo nunca le dije lo que él era para mí. O tal vez sí, pero probablemente lo hice a tan temprana edad que ya no lo recuerdo. Y lo cierto es que sí admiraba muchas cosas de él. Lo que más, el haber criado a mi padre de forma tal que cuando le tocó a él hacer lo mismo conmigo, supo hacer de mí lo que soy ahora, y seguir queriendo ser como él, porque aún me falta mucho para eso.

En fin, sólo quería escribir esto para decirte que te extraño y me acuerdo mucho de ti, y cuando lo hago sonrío porque sé que estás bien. Donde quiera que estés, solamente quiero que sepas lo que callé por cualquier razón que ahora, mirando hacia atrás, carece de importancia.

Te quiero, abuelito.




20091019

Instructivo para viajar

Paso 1.

Tómese un minuto de soledad. No tiene que ser absoluta: si se encuentra en una habitación llena de personas, basta con que usted no se sienta identificado con ellas, con su conversación o con las demás actividades que se llevan a cabo a su alrededor.

Paso 2.

Relájese. Puede que usted no lo sepa, pero es muy probable que se halle bajo una carga de estrés emocional o psicológico que no siempre es fácil de identificar. Este es un paso vital para alcanzar cualquier destino ya que, obviamente, es muy difícil (por no decir imposible) emprender un viaje cuando uno está bajo presión, sobre todo laboral, aunque puede ser deportiva también... ¿cuándo se ha visto que a un portero de fútbol le metan un gol por andar en pleno viaje? ... mmm está bien, no es el mejor ejemplo pero creo que se entiende el punto.

Paso 3.

Comience a pensar. En cualquier cosa. Puede ser importante para usted. Puede ser que simplemente se quedó mirando fijamente un punto y se acordó de algo totalmente irrelevante y ajeno al contexto inmediato. Si es así, ¡felicidades! Ha alcanzado el tan misterioso punto de no retorno. Sí, ese instante que, por más esfuerzo que hagamos, no podemos ubicar de forma precisa ni en el tiempo ni en nuestra secuencia de pensamientos, una vez que hemos regresado del viaje.

Paso 3 (alternativo).

Comience a no pensar. En nada. La idea es desconectarse completamente del mundo que lo rodea. A fin de cuentas, no se va a acabar en un futuro cercano (o eso queremos creer). Apague su cerebro, si es posible. No, no me crea, no es posible hacerlo totalmente (quizá con una buena dosis de alcohol, pero aquí no promovemos los vicios). Verá que pronto, a veces gradualmente, a veces repentinamente, empezará a experimentar cómo toma forma una idea, muy probablemente inesperada e inútil, pero que después lo hará preguntarse qué diablos lo llevó a semejante ocurrencia.

Paso 4.

En este momento usted es uno mismo con el entorno. Lo que es más importante: es usted uno mismo con usted mismo. Suena un tanto extraño ¿no? Tal vez no lo es tanto. Explico: es en instantes como éste que realmente somos uno mismo. Tengo la teoría de que se debe a la falta de distracciones, de influencias, de "contaminación" por parte del mundo exterior. Y es que este mundo exterior ya no es. Ahora se ha vuelto interior. Y es precisamente en esta introspección cuando pueden surgir las ideas más descabelladas, o las más originales, quizá hasta las más revolucionarias (sólo lo sabrá cuando se decida a ejecutarlas). En fin, en este espacio que podemos llamar nuestro, podemos ser y hacer lo que queramos, sin límites.

Paso 5.

En realidad no sé si definir esta etapa como un momento establecido del proceso divagatorio (creo que acabo de inventar otra palabra). La verdad, en mi experiencia, nunca me he dado cuenta del momento exacto de mi regreso. Simplemente... despierto. Las causas de la súbita interrupción al trance son misteriosas. Puede ser provocada por un sonido, por una imagen, por un cambio de luz, etc. Lo cierto es que, cuando uno regresa, no puede dejar de preguntarse cómo llegó ahí, a ese momento en particular. Sólo nos queda esperar al próximo tren del pensamiento, o aeroplano de la mente, o lluvia de ideas, o como quiera usted llamarle. En fin, como bien titula este blog, al próximo autisteo. Hasta entonces, tendremos que seguir viviendo de este lado de la realidad, lo cual no es malo, pero le aseguro que podría ser mejor.

Advertencia:

Por su propia seguridad, le aconsejo abstenerse de experimentar estos episodios cuando se encuentre detrás del volante. Sí, lo sé, puede resultar complicado, puesto que generalmente se presentan de forma involuntaria y por demás inesperada. Pero hay que hacer el intento. Puede ser un disco con canciones que se sabe, y al cantarlas evitar la distracción excesiva con respecto al camino. Puede ser bajar los cristales totalmente, para empaparnos de la atmósfera y los ruidos de la ciudad. No sé, lo que sea, el punto es evitar divagar lo más posible. Puedo asegurarle que regresar repentinamente de uno de estos viajes y ver el auto de enfrente a sólo unos cuantos centímetros asusta. Y mucho.

It is green outside
Where it seems magical
And if nothing works
We'll do nothing
I hope we're on time

- Mew




20090903

Problemática de la coincidencia III

Me descubro (tarde) siguiendo una estrella polar que no es, que invierte a su antojo los polos de mi ser, a veces sin querer, a veces haciéndome estrellar en una ruta tan alterna que no es posible seguir. Mientras observo mi brújula, has llegado a tu destino hace ya tiempo, y yo me quedo maldiciendo inconveniencias de una mala sincronización. Navego a través de oleadas de incertidumbre, sin cordura; soy capitán y esclavo de mis propias decisiones. De mis propias incoherencias, conclusiones al acecho de una mente ingrata y susceptible, como el mismo mar de identidades que he tenido que sortear y que al final responde a un solo nombre. O tal vez creo que en ocasiones llego a islas desiertas y seguras, que tan sólo condescienden con mi forma de viajar.

Será que sólo pienso en tus
ojos como una expresión del color del universo, o una extensión de un portal hacia otro mundo persuasivo y paralelo. Puede ser que me he sentido absurdamente afortunado por contar con tu presencia, tan fugaz como frecuente tu ausencia. Incluso es posible que halle cierto extraño placer en tu silencio suspicaz. La coincidencia se vuelve un problema cuando es alimentada por respuestas ambiguas, por suposiciones yuxtapuestas con minutos transcurridos bajo polvo cósmico y las nubes de testigos.

El problema de esa sonrisa es el estado que provoca, de vulnerable, obsesivo y fatídico embeleso, la gravedad intransigente que convierte al corazón en estadística más de tus recuerdos. Como si contaras las hojas secas bajo tus pies, con el desdén oculto y típico de quien se sabe poseedora de mis momentos de luz e inspiración. El problema de una mirada, de una palabra, es que le quita toda facultad a mis intentos por hacer del olvido un modo de vida. Lo inquebrantable de mi espíritu adquiere entonces cualidad de ficticio.

El problema de la coincidencia es la combinación de ojos y café. De música en clave que no deja de sonar a sueños entre calles y paseos entre la luna con la estela de tu voz. El problema de coincidir es querer alinear tus minutos con mis días, tus días con mis semanas, en búsqueda tan sólo de una memoria contigo que transforme este mundo y le conceda explicación. El problema de la coincidencia... es que al mismo tiempo existe, y no.


20090819

Heartbeats

Influenciado por mi actual e insoportable bloqueo creativo, decidí postear lo siguiente, que tiene ya algunas semanas. Es curioso lo que se puede lograr juntando algunos versos/estrofas significativos de algunas canciones que me gustan. Por supuesto, puede resultar en una sarta de incoherencias, pero creo que esto no salió tan mal. Espero que reconozcan por lo menos unas 3 ó 4. Canciones, no incoherencias ;)

One night to be confused
one night to speed up truth
and you change the beat disguised
like a call to realise

I am all the days
that you choose to ignore,
and anything to make you smile,
it is my better side of you to admire

I would like someone to make a map,
mark my home and draw some lines that match,
'cause she knows that it'd be tragic
if those evil robots win
I know she can beat them

Here I dreamt I was an architect
and I built this balaustrade
to keep you home, to keep you safe
from the outside world
I'll be the fire escape that's bolted to the ancient brick
where you will sit and contemplate your day
Ooh I don't know what to do
about this dream and you
I wish this dream comes true
Help, I'm alive!
My heart keeps beating like a hammer,
so maybe tomorrow I'll find my way home

Lay off, don't stray
well my kind's your kind
I'll stay the same!
Gravity, release me
and don't ever hold me down,
now my feet won't touch the ground

I've had enough of this parade
I'm thinking of the words to say
(as the world is soft around her
leaving me with nothing to disdain):
and I'm shaken, then I'm still;
when your eyes meet mine I lose simple skills,
like to tell you all I want is now.

20090806

Insomnio injustificado (o el tren de las 2)

Ya es oficial. No puedo dormir. Creo que algo no está del todo bien en mí. No sé qué es, pero he de averiguarlo pronto, porque creo que no es ni sano ni normal estar escribiendo a las 2 de la mañana. Ya estoy de nuevo preguntándome si esto es normal, y a cuántas personas en el mundo les estará pasando en este mismo momento. Lo que es peor, sin razón aparente, sin justificación alguna. ¿Será por el puro gusto? Ya no me queda claro si puedo aplicar esa palabra. No ahora. Podría ser que la tinta y mi caligrafía deformada sean un catalizador de mi momentánea ansiedad. Tampoco sé qué tan adecuada sea esa condición. Evidentemente, no descanso, pero no me atrevería a calificarme de ansioso a mí mismo. Probablemente de obsesivo-compulsivo, aunque ni siquiera soy capaz de asegurar que tengo alguna obsesión que me cause algún desorden mental (otro más).

Es decir, todos tenemos alguna obsesión ¿no? Bueno, tal vez no nos gusta llamarla así. Quizá es una "meta" o un "sueño", que resultan palabras más amigables, por lo menos a primera vista. Pues sueño es precisamente lo que no tengo en este instante. No en el sentido fisiológico del término. Siento mis párpados cansados, sí, pero simplemente no funciona cerrarlos y esperar la inconsciencia. O subconsciencia, mejor dicho. Ahora, no puede llamársele meta a algo que no tienes claro, ¿o sí? O sea, si no tienes claro como conseguirla, ni cuándo, ni dónde. Peor aún: ni siquiera tienes en mente a quién te gustaría tener a un lado cuando eso suceda.

Pero sí tengo cosas en mi mente. A veces creo que demasiadas. Tengo "pendientes", "objetivos", en fin, cosas que quiero hacer. Lugares que conocer, personas. Sobre todo personas. Llámenme frío. Llámenme analítico. Eso no evitará que deje de pensar en cómo ha afectado mi vida cada gesto, cada palabra, cada acto que he experimentado de cada individuo que se ha atravesado en mi vida, cercano o no a mí. Por supuesto que me gustaría pensar que lo que hago o digo también influye en los demás, y que lo hace de forma positiva. O negativa. Digo, por eso de que "no hay mal que por bien no venga". A lo mejor te cruzaste conmigo y te dije algo que no querías o no esperabas escuchar, pero que igual te serviría después. A lo mejor no te simpatizo porque me saludaste y te puse mala cara, producto de mi mal día, mi mal humor, o más probablemente de mi carácter introspectivo en exceso. O tal vez lo contrario. Tal vez me aprecias por alguna razón que no alcanzas a comprender. Tal vez no has descubierto que posiblemente hasta me quieres un poco, o un mucho.

Ya se me acabó la hoja, lo cual no tendrá sentido cuando transcriba esto en la computadora, pero creo que es una señal de que ahora sí necesito dormir. Son demasiadas ideas en tan poco tiempo (for the record: son las 2.35am) como para seguir tratando de ordenarlas. Cómo quisiera verme desde fuera... quisiera ser director de mi propio "Truman Show".

I wake up
And the day feels broken
I tilt my head
I'm trying to get an angle

- Björk

20090804

So give me coffee and TV

Hoy es martes. Y de repente, se me olvidó que lo era, pensé que era miércoles. Creo que existe una explicación perfectamente lógica: el vaso de frapuccino moka con crema batida que me estoy tomando en este momento. Ya sé, probablemente después me queje de su casi obsceno contenido calórico (jajaja naah, no es cierto), pero no me importa. Y es que un café como este, específicamente, es una de las cosas más deliciosas del mundo. Si me dan a escoger entre esto y el aroma de las palomitas recién hechas, la verdad es que me pondrían en una verdadera encrucijada. Sería una lucha encarnizada entre dos monstruos hechos de sabrosura. Me atrevo a decir que hace que el tiempo se pase más rápidamente y, contrariamente a lo que comúnmente se pensaría que provoca, es decir, la aceleración de los sentidos, a mí en particular me relaja bastante. Porque cuando uno mejor se la pasa es cuando más rápido transcurre el tiempo ¿no? ¡Qué diablos! de repente ya son las 11 de la mañana.

Y es que, independientemente de sus propiedades acelerísticas (¡bravo! acabo de inventar una palabra) y al mismo tiempo relajantes, no se puede negar que una taza/vaso/lata de café, ya sea caliente o frío -prefiero este último, si me preguntan- resulta el pretexto perfecto para interactuar no solamente con otras personas, sino con nuestro propio mundo. Piénsalo: ¿a poco no trabajas más a gusto con un café a la mano? ¿no fluyen mejor las ideas? Y si lees un libro ¿no imaginas más fácilmente personajes y escenarios? Si conversas con alguien ¿no te cuesta menos trabajo aclarar lo que vas a decir antes de hacerlo, o entender por completo lo que te dice? Oh yeah, let it flow.


Por estas razones (ok, seguramente hay muchas más, pero para mí éstas son las principales), he aquí una oda corta al café, totalmente improvisada:

oh! café, que desarmas conflictos,
con tu líquida sustancia,
pequeña fuente de desvaríos

oh! café, que haces juego con ojos y sonrisa,
eres auténtico imán de palabras
eres genuino autor de felicidad fluida

oh! café, por favor haz que el momento
que con sabor haces que transcurra
regrese a mí sin mayores miramientos
y dure por lo menos una taza por cada luna.



20090727

Oh rainy day, come 'round

Me gustan las tardes lluviosas por dos razones. Una de ellas es ver llover desde mi ventana. Seguramente pensarás "¿y eso qué tiene de entretenido?". La verdad es que no tengo una respuesta clara para eso. Tal vez me entretengo con cosas muy simples. Tal vez lo hago porque lo sencillo resulta una especie de alimento para mí, que tengo tendencia a complicar todo. La única certeza con que cuento es el olor a tierra mojada. Creo que es una de las cosas más agradables del mundo. Le da un sentido de renovación a todo lo que observo debajo del agua cayendo. Ya sea un jardín, una banqueta, otra ventana... sea lo que sea, es como si la atmósfera se lavara, como si de pronto todo se detuviera y sólo se está ahí, mirando las gotas fundiéndose con el entorno, o chocando con él. Como si algo o alguien hablara y sólo observando la lluvia, escuchándola caer, pudiéramos reunir claves para descifrar un mensaje que, por supuesto, siempre es diferente.

La otra razón es tal vez un poco menos común. Hace poco pude hacerlo, y recordé cuánto me gustaba. Caminar bajo la lluvia puede tener un efecto un tanto terapéutico. Obviamente, hablo de una lluvia moderada, no de una tormenta, no me gusta para nada la idea de una pulmonía, gracias. Bajo el agua golpeando mi cabeza, las ideas fluyen un poco más lentamente, hasta convertirse en frases aisladas; incluso dan ganas de quedarse de pie en un lugar, y solamente sentir el aire alrededor. O no sentir nada. Ser testigo de la luz filtrándose entre prismas que gravitan un momento y se deshacen en el suelo. Ser parte de un fenómeno más allá de mí mismo, poco menos que perfecto (para serlo sólo me faltaría el tacto de tu mano). No sé, quizá ya estoy en el proceso de terminar de volverme loco, sólo me gustan estas cosas que de repente, y por extraño que parezca, resultan de ceder a un impulso ocioso y latente.

I wanna hold your hand.
- The Beatles






20090726

Pánico escénico

Escribí esto hace unos 2 años. Me recuerda que este asunto de la vida es una espiral.

Olvidó sonreír. Olvidó cómo era dejarse llevar por el momento. Dejarse arrastrar por la corriente y abandonar todo indicio de razón. Inesperadamente se sintió sin valor. Con el corazón oprimido por la fuerza de su mente; sí, una de esas ideas que se instalan en el subconsciente y no dejan actuar aunque se quiera. Aunque se haya estado deseando. Como un pánico escénico que obliga a pensar en lugar de animarnos simplemente a improvisar. Improvisar. Dejarse llevar. Nadar con la corriente. Todo parece un tren de palabras con algunos puntos suspensivos como polizontes. Sin destino fijo, las vías guiándolo sin más hacia la desesperación de lo desconocido. O mejor dicho, de lo desacostumbrado. De lo olvidado.

Otra vez el olvido. Otra vez el vacío. Otra vez el arte esquivo de la realidad. Y maldice el miedo, porque con él sus ganas resultan extras prescindibles en una obra de la que se ha vuelto director obsesionado con la perfección. Con la banda sonora de lo que ahora se ha convertido en una película. Con los ángulos, con la composición, con el guión. Con las palabras de una novela que no sabe cómo escribir. Lo peor del asunto es que todo está en su mente, y lo sabe. Y ya no ve el vaso medio lleno. Ni siquiera sabe qué es lo que tiene dentro… y ha perdido la mirada tratando de averiguarlo.

I want so badly to believe
that there is truth,

that love is real;
and I want life in every word,
to the extent that it's absurd.

- The Postal Service






20090723

El tren de la 1:00

¿Es física o psicológicamente posible poner la mente en blanco? O sea, como ahora intento. A que si digo lo que pienso no digo nada. De verdad no tengo idea de qué escribir. Sólo sé que quiero hacerlo. Pero no tengo una excusa. Ni inspiración... bueno, la poca que tenía puede ser que me la haya robado la voz del otro lado de mi celular hace un rato ;) Lo que me lleva a otra cuestión: ¿se puede pensar en algo que pensar? o lo que es más raro aún, si se tiene algo que se piensa todo el tiempo ¿se puede pensar en dejar de pensarlo? Seguramente habrá un momento del día en que dejamos de hacerlo. Tal vez bajo la regadera, o al arreglarnos, al desayunar, o en el tráfico... ¡momento! ¿en el tráfico? sí, así es, leyeron bien: en el tráfico.

Explico: De repente, y aclaro, muy de vez en cuando, me pasa que voy manejando como si nada, siguiendo la ruta de siempre, cuando de la nada ya estoy en un tramo del camino más adelante. Es como si despertara de un trance o algo así. Dicen que los hombres no podemos hacer 2 cosas al mismo tiempo -y generalmente estoy de acuerdo, afortunada o desafortunadamente somos simples-, pero... ¿cómo funciona mi cerebro entonces, puesto que mi mente puede irse, casi literalmente, mientras que mi cuerpo sigue al volante? ¿Acaso se debe a la rutina? ¿Tendrá que ver con quedarse viendo fijamente el coche de enfrente y sólo seguirlo a distancia prudente? ¿Se requiere tan poco para manejar? ¡Eso explicaría muchas cosas sobre nuestro amado y nunca bien ponderado transporte público! (rastreando sarcasmo: detectado 100%)


Lo que es más impactante aún (y que de hecho es lo primero que se me viene a la cabeza tras regresar de mi viaje), es que Alguien allá arriba, o abajo, o donde sea, porque se supone que es omnipresente, me quiere mucho, y por eso estoy aquí en este momento. Esto me lleva a otro pensamiento: ¿estaré destinado a algo grande? ¿a cambiar el mundo? ¿será posible que esto pase algún día, si de buenas a primeras se me van las cabras? Y ya subidos en este tren de ideas, si está escrito que haga algo "importante" por mi país, o por mi gente, o porque me dieron ganas... ¿estoy capacitado para llevar a cabo mi plan para tratar de conquistar el mundo? digo.. ahem.. ¿para tratar de mejorarlo? Es decir, ¿soy bueno en lo que hago?

Hace poco, en una reunión, me presentaban: "...él es mi amigo arquitecto, y es muy bueno, eh!" Sinceramente no pude evitar pensar "ok, probablemente lo sea (jajaja modesto el señor), pero ¿tú cómo lo sabes si nunca has visto un proyecto mío?" o sea, en qué te basas para decirlo? en que somos amigos y me consideras una buena persona y, por ende, buen profesionista, buen arquitecto? Ahora, esto no es cosa de autoestima, por supuesto que me considero bueno. Me lo han dicho varias personas (aunque confieso haber pasado por esa horrible etapa en que uno se pregunta por qué demonios sigue haciendo lo que escogió como carrera). Sin embargo, tampoco es cosa de democracia, evidentemente, ya que la arquitectura, como arte que es, es apreciada de forma subjetiva, lo que puede ser sublime para unos, puede apestar terriblemente para otros. Siguiendo esta lógica, ¿soy como un artista incomprendido? Seguramente, porque a esta hora (1 am) yo mismo entiendo muy poco de lo que a mis dedos les da la gana teclear.

Entonces, ¿qué lo hace a uno "bueno"? Es decir, bueno en general, bueno a secas. ¿Lo que hacemos? ¿cómo lo hacemos? ¿lo que pensamos? ¿lo que dejamos de pensar? Al final creo que lo bueno al cien por ciento no existe, ni lo malo. Probablemente no sea posible hallar mentes en blanco por completo. O en negro. Claro, si por eso se le llama "materia gris"...

With your feet in the air
and your head on the ground
Try this trick and spin it, yeah
Your head will collapse
But theres nothing in it
And youll ask yourself
Where is my mind?

- The Pixies

20090717

Desde el espejo

Desde el espejo todo parece más fácil. Puede ser que por eso me asuste a veces la silueta del otro lado. Sobre todo durante un apagón. Bañada en penumbras, la figura que observo frente a mí me resulta tan misteriosa y desconocida, que parece no ser yo, sino otra versión de mí. Una más oscura, más egoísta, tal vez. Como si todo aquello que oculto al mundo exterior quedara de pronto expuesto, sin protección alguna ni para mí, ni para quienes me rodean. Como un alma desnuda que, para no morir de frío o desesperación, decide alimentarse de los miedos o inseguridades de los demás. Incluso de sus recuerdos, manjares devorados ávidamente para poder poseer más historias de las que se puede imaginar.

No obstante, el reflejo es siempre objetivo. Puede ser más bien que yo no lo sea tanto. Puede ser que el miedo a la oscuridad, aparentemente superado a temprana edad por la mayoría de las personas, en
realidad se convierta en un temor latente en nuestra mente y nuestra memoria. Un temor al mundo detrás del espejo. Un temor a esa versión desconocida de cada uno de nosotros mismos.


Aún con todo esto, creo que lo verdaderamente difícil de devolverle (y sostenerle) la mirada al "yo" alternativo es no discernir en sus ojos la diferencia entre la luz natural o ambiental, y la que debería emanar de ellos. O sea, que los colores en las pupilas comienzan lentamente, poco a poco, a convertirse en sombras grises que se funden con el escenario. Y entonces el rostro se transforma gradualmente en una especie de máscara de yeso, sin expresión alguna que pueda ser sujeto de identidad. Sin embargo, sabemos que ésta está ahí, en algún lugar recóndito de nuestro ser, o quizá sólo está escondida tras el marco del espejo. Aunque tal vez la persona ideal, ese "yo" perfecto (o imperfecto) que queremos ser, prefiere permanecer oculta a nuestra propia mirada. ¿Quién sabe? Puede ser que haya una remota cantidad de universos entrelazados entre sí, de los cuales sólo percibimos uno de tantos posibles reflejos, como mirarnos en el agua y no poder distinguir con claridad el fondo. Puede ser que el punto de conexión entre esos mundos, entre esas identidades, sea precisamente el plano copiado de nuestro entorno, con nuestra imagen impresa, que decidimos colgar sobre un muro cualquiera.

Tal vez sólo basta reunir el coraje necesario para atravesar ese plano. Tal vez se pueda explorar cuanto queramos, conocer y convivir con todas nuestras versiones, las del pasado, presente, y los posibles futuros. Tal vez todo sea más fácil del otro lado del espejo.

Who is the man I see
where I'm supposed to be?

- Keane




20090712

Detalles de una alegoría

Me recuerdo preso de la dulce transición de tu mirada a tus labios.
Me supongo libre de todo tipo de miedo. De todo tipo de tiempo.
Nos volvemos entes desafiando las nubes,
conquistando la luna,
habitando el espacio entre el agua y la espuma.

Me convierto en alquimista de palabras imposibles,
para ver si así consigo detenerme en el milagro de tu boca.
Para ver si puedo conjurar alguna fórmula infalible
contra lo efímero de este momento
que se vuelve nada más que consecuencia
de un ardid publicitario de mi mente.

Cuento los segundos implacables que le quedan de vida
a este mundo paralelo. A este inocuo universo.
Y de repente todas las piezas concuerdan si sonríes.
Ya no importan sobredosis de pensamientos.
Ya no importan las crisis de incertidumbre
Todo está bien cuando te escucho hablarme de tus sueños
con esa claridad que te sigue a cada paso,
con esa paz que emana de tus ojos de ocaso.

Así, frente a frente, es como quiero estar siempre.
Percibiendo tu voz infiltrándose en mis venas.
Sintiendo que subsisto a base de suspiros.
A base del tacto de tu nariz con la mía.
Entonces tomas mi mano,
y mis dedos se entrelazan con los tuyos tan despacio
como puede ser posible conocerte.
Te acercas y me besas
tan natural como inesperadamente,
y navegamos entre estrellas y notas musicales
y planetas que cambian de color a nuestro alcance.

Al final, comprendo que todo esto no es más que
una ficción demasiado perfecta,
en la que estas líneas se convierten en poesía,
y los versos intentados tocan tu alma.
Lo que sí hay de cierto es un te quiero
que gravita dentro mío
y que simplemente quiero estar contigo,
aún sin espacio ni planetas,
sin crestas marinas, ni lunas, ni acordes,
ni siquiera estrellas que mirar.
Verás, me encanta la versión de ti
que asalta mis ideas y mi descanso,
y puedes llamarme irremediablemente loco,
pero adoro mucho más estar despierto
para poder verte a los ojos.


So when I see you next we'll make the most of it,
tell the sun to start moving again.

- Athlete


20090701

Diálogo interno (sobre el karma)

- Qué onda.
- Qué hay.
- Nada, aquí. Tú?
- Pues igual. Qué pasó, para qué me llamaste?
- Yo? No sé de qué hablas.
- Sí, claro no te hagas, siempre que le das demasiadas vueltas a algo (y eso ya es decir) me consultas.
- Mmm, no, no es cierto.
- Ajá...Y quién te hace el paro cuando de plano ya no sabes cómo reaccionar?
- Pues... pues tú.
- Ya ves? A ver ya, dime qué quieres, que tengo cosas que hacer.
- Está bien. Básicamente me preguntaba sobre el karma y esas cosas.
- Ajá.
- Tú crees que hay como un límite? o sea, hasta qué punto es válido eso de que todo lo que haces se te regresa?
- O sea cómo?
- Sí sí... ya sabes, si eres un ojete con la gente, al rato la gente va a ser ojete contigo, si haces cosas buenas te pasan cosas buenas y eso.
- Chale, me estás diciendo que por esas tonterías me tienes siempre encerrado y sólo me dejas salir cuando hay vodka?
- Pues... no, no es tanto eso... Bueno sí, la neta es que a veces te puedes poner muuuuy malacopa. A poco crees que ya se me olvidó que casi me saboteas el otro día?
- Jejeje... Nomás tantito, pero bueno, tiene que haber un balance no?
- Esteee... sí sí lo que digas, pero entonces cómo ves
- Mmm no sé, a ver dame un ejemplo.
- Supongamos que yo quiero alg..
- Pues lo tomas y ya! No seas wey!
- Déjame terminar! Supongamos que quiero algo, pero si hago algo para conseguirlo muy probablemente altere mi buen karma...
- Por qué o qué?
- Porque implicaría quitarle ese algo a alguien... aunque de todos modos no depende sólo de mí.
- Ajá... o sea como quitarle un dulce a un niño?
- Esteee... sí... algo así...
- Ajá...
- Entonces... digamos que lo obtengo, pero a cambio me quedará un cargo de conciencia muy grande... o bueno, pensándolo bien, quién sabe qué tan grande, pero seguro lo habrá. Y lo verdaderamente malo no es estar tranquilo contigo (de todos modos siempre me estás chingando), sino que después se me va a regresar quién sabe de qué forma. Y estar pensando en esto, en lugar de estar actuando con respecto a lo que deseo, hace que me pregunte qué tanto lo deseo, porque si realmente quieres algo (y no me encanta darte la razón) pues lo tomas y ya, no?
- A ver si entendí: dices que no sabes si quieres ese algo?
- No! Concéntrate! Sí lo quiero, de eso estoy seguro. Pensaba que no, pero ya descubrí que es algo que no puedo evitar.
-Zas... malditas drogas..
- No estoy hablando de drogas! Chale ya me acordé porqué casi no hablo contigo, no se puede.
- Ya ya ya, cálmate, pareces nena, sólo bromeaba. Uy, no aguantas nada... A ver, qué más?
- Qué más de qué?
- Cómo de qué! Pues cómo está eso de que no lo puedes evitar?
- Mmm... pues ya sabes, ya estuviste ahí
- No, no sé.
- Ash...me vas a hacer decirlo... lo que quiero decir es que ya traté de borrar todo eso de mi mente, y por un tiempo pensé que lo estaba consiguiendo, pero bastó un momento para darme cuenta de que no. Es más, yo creo que la cosa empeoró, si es que se puede aplicar la palabra.
-..... A ver espera, espera.... estás hablando de lo que creo que estás hablando????
-Esteee.... de qué?
-No te hagas wey!!! estás hablando de esa palabreja de 4 letras, acaso???
- Nooo.... no
- Nooooo, no es cierto!!! Sí es eso!!! Ya decía yo que estabas demasiado sensible últimamente!!! Jajajaja pero cómo creeeees??!!!
- Pues es que...
- Nada, no digas nada! Habíamos quedado que esto no iba a pasar!!! O qué, ya no te acuerdas de cómo terminó todo la última vez???
- Sí, cómo olvidarlo. Tuviste mucho que ver, por cierto.
- Claro, si llevó todo mi sello!
- ...pendejo...
- Qué dijiste?
- No no, nada...
- Está bien, admito que me pasé, la verdad no eras tú, era yo, o bueno sí eras tú, pero al mismo tiempo yo, y pues ya sabes que eso de pensar no se me da demasiado. Es más no sé porqué me preguntas cosas me cae.
- Pues básicamente porque no me queda otra opción.
- Ok, haré como que no dijiste eso.
- Bueno, bueno ya, entonces qué hago??? aplica en este caso el karma???
- Yo creo..... que te hace falta alcohol.
- (¬¬)
- Jajajajaja oohh pues... te digo que no aguantas nada... A ver, estás seguro de que lo quieres no?
- Sí.
- Y estás seguro de que es algo que te haría feliz
(y a mí)?
- Sí.
- Entonces... yo digo... (pon atención, que no lo vuelvo a repetir) que hasta el karma tiene excepciones, cuando es por las razones adecuadas.
- Y cuáles son las razones adecuadas???
- Cállate! He dicho!
- Si me dices habrá alcohol...
- Aaah! muy bien, ya estás aprendiendo! Está bien, te lo diré: yo creeeeeooooo......
.... creo.....
.... creo..
- Quéeeee????
- Oh, ya voy ya voy! Creeeooo que... las razones adecuadas para que el karma no aplique, son precisamente aquéllas que nos complementan.
- Nos?
- Pues claro! A poco crees que te puedes librar de mí así como así? A lo que voy es que si es bueno para ti, es bueno para mí, y al final los dos somos felices y nos llevamos bien. Aquí sí aplica el "que sea lo que Dios quiera". O sea que ya no te preocupes tanto, pues.
-Mmm... pues sí, puede ser que tengas razón, de hecho no puedo hacer muchas cosas a gusto porque me la paso pensando en todo lo que implica conseguir lo que quiero, si es que lo hago...
- A ver a ver a ver, momento, que soy lento... ni siquiera sabes si lo vas a conseguir, y ya te estás preocupando por las consecuencias???
- Pues... más o menos, sí
- Aaaaaaaarghhh no puede ser!!!! Y qué esperas para actuar!!! Sólo me haces enojar!!!!
- Pero es que...
- Pero nada!!! es más, vete de aquí, recuerda que el depresivo y malacopa soy yo! Luego me compensas con unas chelas, o ya de perdida un videojuego (por cierto ya le eché el ojo al Prototype)
- Ok ok ya voy!
- Fuera! shoo, shooo!
- Oye
- Queee?
- Gracias... creo.


(Por si no lo habían notado, o mi defectuosa redacción no les dejó entender muy bien, esto fue una conversación que mantuve con mi otro yo hace poco)

My thoughts were so loud
I couldn't hear my mouth.

- Modest Mouse




20090622

Confesiones (o confusiones) de un adicto a la carne

Lo sé. Soy un puerco. No sé cómo, pero pude acabarme una rica, deliciosa y extremadamente grasosa pizzamburguesa. Además: papas, chorizo, chistorra, y por supuesto, la exquisita combinación colesterosa de queso, tocino y queso filadelfia, bautizada como puercoburrito. La verdad no sé qué fue más divertido, si el proceso de preparación (en el cual por cierto más que participar...mmm.. supervisé), o el hecho de comer y disfrutar un monumento a una de las cosas más sabrosas de este mundo: la carne.

Ya sé, ya sé, habrá quien diga "comer carne no es saludable", "te va a dar un infarto un día", "por qué comes animales". Sólo tengo una cosa que decir (cito a Troy McClure): Si las vacas pudieran comernos, lo harían. Así es.




(Lo sé, el audio es pésimo, pero no pude encontrar otro link más decente. )

Y bueno, esto muy bien puede no ser cierto de este lado del universo. Pero para qué molestarnos en investigar, si la carne es tan sabrosa? Más cuando es acompañada por otro buen amigo: el queso. Sí, ese gran aliado lácteo que, en cantidades adecuadas, resalta el sa
bor y la textura de casi cualquier cosa. A esto, agréguenle la bebida. Y qué hay mejor para acompañar que una cerveza bien fría? Ok, tal vez vino, pero no nos vamos a poner lujosos.

Ahora, seguramente hay muchas cosas mucho más asquerosas, engordativas y saturadas de grasa que esto. Pero no nos importa. Tuvimos el placer (léase: orgasmo estomacal) de degustar un platillo que simplemente al nombrarlo puede causar deficiencias cardiacas. Imaginen esto: una rebanada de pizza (de carnes frías, preferentemente), una hamburguesa, jitomates (hay que cuidarse, claro), papa, queso filadelfia, tocino -en cubos, por favor- y, para rematar, otra rebanada de pizza.

Así nació la pizzamburguesa:

Me dijeron que hacía mucho no me veían tan feliz y/o emocionado. Ésta de arriba puede ser una de las razones, aunada al hecho de que estaba disfrutando un rato verdaderamente agradable en compañía de mis amigos (probablemente -o seguramente- exista también el factor "posible-presencia-de-cierta-fémina-procedente-de-tierras-austral-orientales"). Como sea, sólo me resta decir: Gracias, amigos V.I.PIGS!!!

Oink!

Cerdo... No me llames Cerdo
¡Mueve tu puercooo!

-Molotov




20090615

Dreaming of when the morning comes...


Caminas lentamente por el jardín de tu memoria. Bajo los adoquines polvorientos de experiencias pasadas, escuchas cómo el viento arrastra con desdén las palabras convertidas en hojas sin vida, de las cuales solamente queda un color pardo, una mancha verdusca, constancia inerte de un significado ya olvidado. A tu paso casi todo son enredaderas invadiendo cada muro, cada banca, cada fuente seca dentro de una maraña de confusión y soledad.

Mientras vagas y divagas, recorres las murallas levantadas por la nostalgia, no sin advertir los escombros a lo largo, producto del olvido incesante que amenaza con embates desde la nada. Esa nada que consume toda humanidad. No quieres imaginar las consecuencias del vacío entrando a tu conciencia. Podría ser que tu mirada se perdiera en laberintos de noches oscuras e intratables. Y tus ojos, incansables tanto tiempo, resulten fatigarse tras visiones repetidas tantas veces en rincones impensables de tu mente. La música se tornaría aún más triste, e incolora... como notas sin sabor que caminan como hormigas siguiendo las grietas de una baldosa. Volverías a pasar hojas del calendario ausentemente, sin darte cuenta que en la cuenta los días no se van de forma permanente. Regresan como cuervos y picotean tus recuerdos, intentan sacarlos de cualquier resquicio libre bajo tierra y alimentar con ellos a la luna. Dejando morir de hambre tu alma. Dejándote sin voz para pedir ayuda alguna. Y poco a poco, desfalleces y te vuelves una estatua que ve pasar los sueños, impasible.

Gradualmente despiertas. Te inunda el sonido de estrellas matutinas. Entonces tu espíritu se sacude el fango acumulado del charco en el que tropezaste. Despacio, muy despacio, te vuelve la sonrisa, porque encuentras, en el centro del jardín, ese árbol que dibuja en su silueta tu propia voluntad. Porque sabes que sólo te hace falta sentir la brisa filtrada por sus ramas. Tomar un baño de luz interrumpida por sus hojas. Te ríes de ti mismo. Entonces, simplemente te levantas y rehaces tu camino, dejando que las partículas de aire circundantes se hagan cargo y le den calma a tu memoria.


"They are turning my head out
to see what I'm all about,
keeping my head down
to see what it feels like now,
but I have no doubt
one day the sun will come out." - Coldplay



20090608

Crónica de una paranoia anunciada

Hace unas horas, llamaron a mi casa de parte de una compañía de tv por cable. Me preguntaron a qué hora podían pasar los técnicos para la instalación del servicio. Ah, caray! no sabía que habíamos contratado cable! Le dije a la otra voz en el teléfono que llamara más tarde para confirmarle la hora. Siguiente escena, preguntándole a mis papás ¿qué diablos? Y sí, efectivamente, al parecer es parte de una promoción de telmex que mis padres aceptaron y que, por supuesto, me hicieron saber en algún momento de la semana pasada.

En fin, un rato después, llegaron los dichosos técnicos, y me tocó atenderlos. Lo primero que uno hace es checar el id del monito que vas a dejar entrar a tu casa no? no vaya a ser... Y aunque no se puede saber a simple vista, aparentemente eran personas honestas que simplemente venían a hacer su trabajo. Y sí, lo hicieron y se fueron (aunque no muy rápidamente, por cierto). Obviamente, quité lo poco o casi nada de valor que tenemos a la vista, me daba mis vueltas a la sala para checarlos, vaya, que supieran que ahí estaba yo, no?

Y bueno, a qué voy con todo esto? Pues no puedo dejar de preguntarme cómo es que pudo haber existido tanta paranoia en mí desde el momento en que esos dos extraños entraron a mi casa. Es válido, sí, sobre todo considerando que a mucha gente en este país le pasan ese tipo de cosas que no quiero mencionar y que ya te imaginaste. Pero también es triste. Es como suponer que los albañiles, o los plomeros, o los pintores, o para el caso, cualquier trabajador con un oficio que requiera entrar a una casa ajena, son, precisamente, amantes de lo ajeno. Como si no fuera suficientemente mala la situación laboral en la que viven. Y no es que los defienda, es más, sí me ha tocado conocer gente que alimenta estos estereotipos. Pero aún así, es casi como discriminación involuntaria no? Es como si al ver un tipo gordo, chaparro, bigotón, sucio de polvo/pintura/mezcla, automática e inconscientemente pensamos en una clase más de delincuente. "Pero claro, no lo ves? es tan evidente!" El problema es que no debería serlo.

Ah, y si alguna vez se preguntan cómo afectan nuestras decisiones, piensa en mí, que estoy escribiendo esto, porque mi mamá decidió aceptar la mentada promoción de cable, yo decidí archivarlo en algún lugar de mi mente que provocó que me freakeara un poco, la encargada del servicio decidió mandar hoy en la tarde a los técnicos, y por último, pero no menos importante, el encargado del departamento de operaciones de Luz y Fuerza decidió que hoy era un buen día para dar mantenimiento a los transformadores de la calle donde trabajo, por lo cual tuve que trabajar hoy desde mi casa, y enfrentarme así a estas cuestiones de la vida cotidiana.

.... creo que encontré una razón más para amar los videojuegos, pero de eso hablaré luego. Por ahora, creo que voy a dedicarle un poco de tiempo a mi "hijo". Pobre... está ahí solito, nadie lo pela... pero no más!, no seré un padre desnaturalizado!!! XBOX, aquí voy!


"I wanna leave, but the world won't let me go." - Metric

20090601

¿Soy.... o me parezco... o era?

Pocas cosas resultan tan deprimentes como los lunes. Más aún por la mañana. Bueno, probablemente los domingos por la noche se acercan bastante... Esa sensación de que el día que tuvimos para nosotros se nos va lentamente. Creo que el problema radica principalmente en regresar a la realidad de cada uno. Obviamente, si dicha realidad se acerca más a lo que cada uno desea, entonces el objetivo de este post está mal dirigido. Pero olvidemos esto por un instante y demos por hecho que el despertar del lunes es para todos una circunstancia muy poco motivante. Y es que, además de regresar a la rutina, uno se convierte de nuevo en uno más. Me explico: Tengo la teoría de que los fines de semana son tan refrescantes porque son los días en los que tenemos prácticamente todo el tiempo para ser nosotros mismos. Sea, para parecernos a quien queremos ser (según El Libro Negro, de Orhan Pamuk). Porque ser "uno mismo" implica más bien llevar la vida a la que uno aspira, general e inevitablemente influenciada por todo lo que hemos visto y/o vivido a partir de otras vidas de las que somos testigos.

Ser nosotros mismos es extremadamente difícil sin tener un tema de conversación. O sea que si yo llego con alguien que no conozco, al no saber sus intereses, gustos, etc. , es decir, al no tener una referencia a cualquier cosa ya existente que contribuya a definir su vida, posiblemente me acerco a ser "yo mismo" frente a esa persona, y viceversa. Y he ahí el origen de los silencios incómodos. Lo que trato de decir es que el ser "yo mismo" de una forma totalmente pura implica olvidarnos de todo aquello que puede representar una influencia sobre nuestro modo de pensar o de actuar. O sea que... por "nosotros mismos", ¿en realidad estamos siendo un conjunto de imágenes, sonidos, sabores, olores, etc. que nos definen?

Bueno, entonces quizás lo más cercano a ser "uno mismo" es optar por el aislamiento total. Como ermitaño. Tal vez la frase "¡me quiero volver chango!" cobre un nuevo y más profundo significado... ser uno con la naturaleza, regresar a lo básico, ya saben. Estaría buenísimo apreciar la naturaleza desde una nueva perspectiva, ¿no? Pero entonces, si te vuelves uno con la naturaleza, ya no eres sólo tú, eres tú como un ente sumado a otro, y por lo tanto, dejas instantáneamente de ser tú mismo. Mmm... creo que empiezo a entender porqué los que se aíslan terminan volviéndose locos. Porque, sinceramente, eso de correr desnudos y hablar con los animales no acabo de explicármelo.

En fin, quizá la solución a este dilema existencial consista, paradójicamente, en no pensar. Sí, simplemente desconectarnos de todo. Tal vez podríamos dejar la mente en blanco, hasta que seamos tan extraños para nosotros mismos como para los demás. Tal como ocurre los lunes por la mañana.

People are strange when you are a stranger. - Jim Morrison

20090528

Cajetoso, galletoso, chocolatoso...

Por favor alguien dígame que se acuerda del chocolate "Galletoso". Sí, sí, galletoso, no Cajetoso, que es el que sobrevivió (que a decir verdad, ninguno de los dos era -o es- sensacional). Alguien dígame que se acuerda de que en un principio eran dos hermanos de cacao unidos por la afición al caramelo. Uno de ellos, con centro de galleta crujiente tipo bocadín (ush, qué rico), lamentablemente sucumbió ante el poder mediático de su hermano con relleno más suave y cremoso y, por alguna razón, más aceptado por los consumidores. Pero simplemente se trataba de un producto incomprendido, de verdad, no tenía nada de malo, yo mismo puedo asegurarlo. Es más, incluso me acuerdo de la envoltura, ambas tenían un oso (con una gorra tal vez?) que era como la mascota o algo así. ¿Por qué se lo llevaron??? ¿Por quéeeeeee???

...Ok. Creo que ya es hora de comer.

update: El triate perdido.

Acabo de recibir información de una muy buena fuente, sobre el hermano olvidado: Cacahuatoso. Mi mundo se deshace poco a poco (en pedazos crujientes).

20090525

Preparándonos para el apocalipsis

Sí sí sí, el mundo se va a acabar... algún día. En lo que a mí concierne, se está acabando desde el 98. Imagínate, llevo por lo menos 10 años escuchando el mismo cuento (probablemente más, existe la posibilidad de que cualquier recuerdo anterior haya sido bloqueado inconscientemente). Aunque, pensándolo bien... quizá nuestras expectativas como especie se reduzcan a una gran guerra, o una gran enfermedad, o una gran hambruna en la que todos, o casi todos, terminemos muertos. O casi muertos. O no muertos. ¿Quién dice que los 4 jinetes no decidirán unirse en un gran ente (no se me ocurre otra palabra, jinetote sonaba bastante tonto....) que acabe con la humanidad? Piénsalo: guerra -> virus -> muerte -> hambre -> guerra. Seguramente falta muy poco para que los dirigentes del mundo encuentren la forma de fabricar su propio solanum (http://en.wikipedia.org/wiki/The_Zombie_Survival_Guide#Solanum), si no es que lo han hecho ya, y pronto nos veremos obligados a vagar por los caminos infestados de no muertos errantes.


Si me lo preguntan, yo seré el conductor de ese coche. Ya me ví....* Mientras eso sucede, ocuparé el tiempo libre que me queda para dejar un legado en línea, que posiblemente nadie lea, pero nadie me quita la satisfacción de haber hecho algo "productivo" tras casi 29 años en este planeta. Dicen que a los 30 la vida empieza de verdad... ¿O termina? ¿O empieza a terminar??? Como sea, este inminente suceso para algunos, pasado para otros y, probablemente, insignificante para una que otra minoría, servirá de pretexto (o causante) para dejar la mente volar, correr, caminar, escalar, gatear, etc.


Bueno ya, está bien, admito que esto lo he hecho desde hace mucho tiempo, es sólo que hasta ahora tengo el medio y las ganas de expresarlo. Eso, o estaba realmente aburrido. Sí, si estabas preguntándotelo, a veces invento mi propia película, como Homero Simpson. Aunque... mmm.. creo que no podría ser una película completa, más bien son como pedazos de cinta que unidas podrían formar un interesante - o no tanto- collage de imágenes, sonidos, palabras, sensaciones.....

...chocolaaateee......

¿De qué diablos estaba hablando?


*Imagen tomada del cómic (o zomic) "The Walking Dead" de Robert Kirkman. Soy fan.